Los fitofármacos son medicamentos cuyos ingredientes activos se producen exclusivamente a partir de plantas, o de partes de plantas. Su uso se ajusta a los principios de una medicina amparada por la investigación de las ciencias naturales. Los medicamentos herbales del grupo Schwabe deben cumplir, por esta razón, los mismos requisitos que los medicamentos sintetizados químicamente.
Por tanto, los fitofármacos de las empresas que integran el grupo Schwabe deben ser evaluados y autorizados por las autoridades. Han de ser terapéuticamente eficaces. Su uso debe ser inocuo y tolerarse bien. Y la calidad farmacéutica de nuestros productos, por fin, ha de ser invariablemente alta. Otra característica común a los fitofármacos y medicamentos sintetizados químicamente son los estudios clínicos controlados.
35 milliones al año
Desde las primeras investigaciones realizadas con las plantas, pasando por los ensayos clínicos en humanos, hasta que el medicamento a base de plantas obtiene la autorización, transcurren entre ocho y diez años.
Anualmente invertimos unos 35 millones de euros en la investigación y el desarrollo de preparados a base de plantas que contribuyen, por ejemplo, a combatir las enfermedades del sistema nervioso central, el tracto respiratorio o el tracto gastrointestinal.
¿Qué distingue a los fitofármacos?
La particularidad de los fitofármacos queda patente cuando se los compara con los fármacos sintéticos. Los fármacos sintetizados químicamente contienen uno o unos pocos ingredientes activos. Para los consumidores esto se traduce en que dos medicamentos químicos que contengan el mismo principio activo en la misma concentración, y que se administren de forma similar, serán prácticamente intercambiables.
Los medicamentos confeccionados a base de plantas funcionan aquí de un modo bien distinto. El extracto vegetal de un preparado se compone de muchas sustancias diferentes, y es su acción conjunta lo que produce un efecto positivo. ¡En ellos el ingrediente activo, el “corazón” del medicamento herbal, es la totalidad del extracto vegetal!
150 años de experiencia
Nuestro proceso de extracción se basa en más de 150 años de experiencia en la producción de preparados a base de plantas. La compleja maquinaria para el proceso de extracción en múltiples etapas que se ha desarrollado durante este tiempo es única. En gran medida, ha sido desarrollada para satisfacer nuestras exigencias particulares. El conocimiento y la experiencia de Schwabe en todo lo referente a la producción de extractos especiales ocupan una posición única en el mundo. Garantizamos la calidad constante de nuestros extractos a través de unas medidas de control de calidad integrales y de rigurosos controles.
La calidad de las plantas es decisiva
La calidad de las plantas que se recogen resulta decisiva tanto para la obtención del extracto como para el medicamento que se basa en el mismo. Dependiendo de las condiciones medioambientales, del desarrollo de la planta y de su recolección, la concentración de ingredientes activos en las plantas es diferente. Los especialistas del Grupo Schwabe controlan rigurosamente las condiciones de nuestras plantaciones y las de nuestros asociados para la producción de plantas medicinales en todo el mundo.
Todo de una misma fuente
Desde la siembra de la plántula hasta el medicamento envasado, todo el proceso de producción de los medicamentos está en nuestras manos. Esta forma de proceder garantiza la extraordinaria calidad de nuestros medicamentos, efectivos y bien tolerados.
«Todo de una misma fuente» es nuestro concepto empresarial desde hace más de 150 años, lo que nos sitúa en una posición excepcional a día de hoy. El concepto «todo de una misma fuente» garantiza un medicamento a base de plantas de la más alta calidad.
Nuestros medicamentos se someten a ensayos clínicos que evalúan su seguridad y eficacia. El componente esencial de nuestros programas de investigación clínica son los estudios aleatorizados doble ciego, el estándar de referencia en investigación científica.